¿Cómo debes entrenar según tu tipo de cuerpo? - Ectomorfo, mesomorfo, endomorfo.
Existe una manera muy popular de catalogar los cuerpos de las personas, y esas son como ectomorfos, mesomorfos y endomorfos. Clasificación originada en 1940 por el psicólogo William Sheldon luego de investigar y analizar miles de fotos de personas.
Está clasificación que originalmente tenía como objetivo no solo analizar el físico de las personas sino también su personalidad, fue criticada y rechazada en su momento.
Sin embargo en el mundo del fitness quedó muy fija dicha clasificación, donde definió a los ectomorfos como físicos delgados, carentes de masa muscular y grasa, a los mesomorfos como físicos fornidos y anchos, altos en músculo y relativamente bajos en grasa, y a los endomorfos como físicos grandes, algo musculados pero con mayor cantidad de grasa.
Es tal la popularidad de esta clasificación que a la fecha muchas personas siguen pensando que según su tipo de cuerpo están destinados o limitados a verse siempre de una misma manera por el resto de su vida, o sea, un ectomorfo cree que siempre se verá delgado y un endomorfo que siempre tenderá a verse gordito, sin importar lo que hagan, y peor aún, que tienen que seguir una determinada estrategia según su tipo de cuerpo como se muestra en la siguiente imagen.
Según esto los ectomorfos deben hacer ejercicios cortos e intensos y entrenar solo grupos musculares grandes y los endomorfos enfocarse más en hacer cardio. Y la realidad es que no debemos ver esto de una forma tan cerrada, esto de los somatotipos no es algo fijado y definido para siempre.
Como nos dice el experto Menno Henselmans, tu somatotipo solo es una clasificación de la forma actual de tu cuerpo. (esto de actual es clave).
Cada uno tiene la capacidad de cambiar, de mejorar o incluso de empeorar su forma física. Tenemos el ejemplo de casos famosos, los actores que se ven en la necesidad de cambiar según el papel que van a interpretar, como Christian Bale, quien se ha visto como ectomorfo, mesomorfo y endomorfo puro.
Esto mismo pasa con cualquier persona que entra al fitness, yo alguna vez fui ectomorfo, pero ahora puedo parecer mesomorfo cuando estoy definido, o hasta endomorfo si me descuido y subo mis niveles de grasa.
Con todo lo anterior quería llegar a este punto, y es algo muy importante que dice Menno Henselmans, “la forma de tu cuerpo no te define, tú defines la forma de tu cuerpo”. Puedes cambiar de manera significativa tu somatotipo al estar más definido o más musculado.
Lo que nos lleva entonces a entender que esto de entrenar según tu somatotipo o tipo de cuerpo, no necesariamente es verdad, pues como dice Alfredo Valdes en un artículo de HSN, la fisiologia y biologia orgánica no difieren entre somatotipos, por lo que el tejido muscular de un ectomorfo, endomorfo y mesomorfo, responden igual al mismo tipo de estímulo.
En pocas palabras, todos vamos a ser regidos por las mismas reglas del entrenamiento con pesas, y a todos nos va a servir enfocarnos en lo elemental, que es entrenar cerca del fallo, independientemente de si pesado o ligero, cuidar el volumen de entrenamiento, incorporar ejercicios adecuados según objetivos y gustos, etc.
No importa el tipo de cuerpo que tengas, todos podemos responder y mejorar con un buen entrenamiento. Obviamente habrá otras cuestiones como la genética, donde sí podría haber una diferencia en la velocidad de respuesta, puedes ser un bendecido genéticamente que responde muy bien o alguién que por el contrario no le vaya tan bien, esto se ha estudiado, pero no depende de tu tipo de cuerpo, bien puedes ser un ectomorfo que gane rápidamente masa muscular o un endomorfo que pierda rápidamente grasa.
La clave con toda está información, es que no te estreses por el tipo de cuerpo que tengas y quieras hacer cierto programa de entrenamiento “especial” que viste en internet. Mejor hay que entender cuánta grasa y músculo tienes actualmente y en base a esto definir correctamente una planeación para trabajar en tus objetivos.
Si eres una persona muy delgada y sin grasa, entonces puedes empezar con un proceso de ganancia de músculo, hacer un superávit y priorizar el entrenamiento y el descanso.
Si por el contrario tienes mucha grasa, entonces tocará empezar con un déficit para irla reduciendo y de igual forma entrenar con pesas para proteger o incluso hasta ganar masa muscular.
Si haces las cosas bien, y le das tiempo a estos procesos, verás como eventualmente irás logrando un cuerpo “mesomorfo”, porque tu grasa se reducirá, tu masa muscular aumentará y conseguirás verte más atlético.
No olvides que si tienes dificultades para entender todo esto del entrenamiento y nutrición para conseguir un buen físico tenemos el curso llamado “El arte de tener un buen cuerpo”, donde explico todas las bases de lo que deben saber para obtener ese cuerpo atlético y estético que tanto buscamos. Espero que toda esta información les sea de utilidad y si es así, no duden en compartirla.